Sobre nosotros
En Brainworks nos dedicamos a optimizar el rendimiento mental y el bienestar a través de la neurociencia aplicada y tecnología avanzada.
Nuestros programas están diseñados para mejorar la regulación emocional, el autocontrol y la calidad del sueño, entre otras áreas, cómo el deporte de élite. Entrenar la mente no solo potencia el rendimiento académico y deportivo, sino que también es esencial para promover un bienestar emocional y mental duradero a lo largo del tiempo.
¿Cómo lo hacemos?
Previo a los entrenamientos, realizamos una evaluación exhaustiva que incluye una entrevista detallada, una evaluación de síntomas y un electroencefalograma (EEG).
Esta información nos permite crear un plan individualizado adaptado a las necesidades y objetivos de cada paciente. Implementamos programas personalizados que combinan neurofeedback, realidad virtual y simuladores avanzados, los cuales permiten medir, analizar y entrenar las funciones cerebrales de manera precisa. Estos entrenamientos mejoran habilidades cognitivas clave como la concentración, la memoria y la capacidad para gestionar el estrés, así como la calidad del sueño promoviendo una función cerebral equilibrada.
Además, ayudan a optimizar la toma de decisiones, la regulación emocional y el rendimiento general, tanto en la vida diaria como en contextos de alto rendimiento.
¿Puedo entrenar mi cerebro?
Los entrenamientos cerebrales en Brainworks están destinados a personas de todas las edades que buscan mejorar su rendimiento mental y bienestar. Desde niños con dificultades de concentración, hasta adultos que desean optimizar su productividad y bienestar, y atletas de élite que buscan perfeccionar su rendimiento cognitivo y físico.
¿Qué beneficios tengo?
Entrenar el cerebro proporciona beneficios significativos, como la mejora de la concentración y el incremento de la memoria, facilitando el aprendizaje y la retención de información. También promueve una mejor regulación emocional, reduciendo la ansiedad y el estrés. Además, desarrolla el autocontrol, optimizando el rendimiento en ámbitos académicos, deportivos y profesionales. Por último, contribuye a una mejor calidad del sueño, favoreciendo la recuperación mental y el bienestar general.